Una Sech comprometida con las grandes transformaciones
La Sociedad de Escritores de Chile da inicio en estos días, bajo el Directorio Nacional que presido ―y que integran Isabel Gómez, Paulina Correa, Omar Cid, César Millahueique, Ana Partal, Malú Ortega, Roberto Rivera, Nelly Salas, Jorge Calvo y Carolina González― a una Gestión 2022-2024 que desde ya se avizora desafiante. La tarea nos honra y es asumida por este colectivo dando paso a una conducción unitaria, integradora, abierta y pluralista, férreamente comprometida con las grandes ideas y anhelos expresados por socias y socios de la Sech al calor del recién concluido proceso electoral, en el cual cada papeleta emitida aportó lo suyo al enriquecimiento del debate a través del ejercicio de la democracia en nuestra organización.
Transcurridos cuatro años desde los últimos comicios, pospuestos a raíz de una prolongada pandemia que también cobró vidas entre nuestros colegas, el genuino interés por acudir a las urnas tuvo un fuerte correlato en la cifra récord de candidatos, desembocando, por otra parte, en dos resultados especialmente significativos: el Directorio Nacional quedó integrado mayoritariamente por mujeres y por primera vez en la historia a él se incorpora una socia que no vive en la Región Metropolitana.
Es la hermosa intensidad de la palabra expuesta por nuestros pares al poner en práctica, con entusiasmo, su soberanía, la que nos ha decidido a materializar la apertura de comisiones permanentes que den sustento al quehacer cotidiano de la Sech y a las cuales aporten energía y capacidad de iniciativa las socias y los socios, profundizando cualitativamente, de esa manera, la participación. En esa línea, abrimos paso a comisiones permanentes de Educación, Extensión y Comunicaciones, Gestión, Ética, Relaciones Internacionales y Área Social, además de activar una comisión ad hoc que presente con plazo acotado el borrador de nuevos Estatutos y Reglamentos, que estén en consonancia con las necesidades de la realidad actual. Velaremos por cada integrante de esta comunidad; brindaremos oportunidades de formación en las letras, gratuita, de calidad y sin exclusión, abriendo, asimismo, una biblioteca digital que contenga obras de socias y socios; descentralizaremos progresiva y resueltamente las actividades, incorporando además a ellas a los escritores que viven en el exterior; exigiremos en todas las instancias de diálogo el restablecimiento de la anualidad del Premio Nacional de Literatura y la reincorporación de su creadora, la Sech, en el Jurado; y daremos señales concretas de apertura de la Sociedad de Escritores de Chile al mundo social.
Junto con ello, y del mismo modo en que a través de cabildos constituyentes y debates de la Asamblea General impulsamos un sinnúmero de propuestas que han quedado estampadas en el borrador de la Nueva Constitución, acompañaremos ese proceso de cara al Plebiscito de Salida para una Carta Fundamental nacida en democracia, y pondremos nuestro esfuerzo y vocería en pos de que ese cuerpo normativo sea asimilado en detalle en un conjunto de leyes que den forma a políticas públicas coherentes, tanto en el ámbito de las culturas, las artes y el patrimonio, en general, como de la lectura y el libro, en particular.
Así, si en 2021 celebramos los 90 años de la Sech, hoy abrimos camino teniendo en perspectiva lo que más pronto que tarde será el Primer Centenario de una Sociedad de Escritores de Chile que busca, a la vez que modernizarse, rescatar lo mejor de su generosa tradición en las letras, esa que inauguraron Marta Brunet y Domingo Melfi, que universalizaran Gabriela Mistral y Pablo Neruda, y a la que dan vida, hasta la fecha, tantas generaciones. Ese es nuestro compromiso, y hacia allá avanzaremos juntos.
David Hevia
Presidente
Sociedad de Escritores de Chile